«Nubëz RØsäs»

Sé que es nuestra despedida. No será eterna, durará lo que duren estos estáticos minutos que serán marcados por inmóviles agujas de relojes llenos de polvo que cuelgan de esas paredes que encierran historias, cientos de ellas, cargadas de sentimientos.
Debés irte, has cumplido tu ciclo y ahora te consumirás cual ave fénix y de entre las cenizas regresarás camuflado en otro tiempo.
Pero no voy a dejar que te vayas sin decirte que no fuiste un tiempo más, fuiste muchos en uno solo. Fuiste dolor, te adueñaste de mis lágrimas, respiraste mi aire hasta ahogarme, por momentos quise huir de vos, pero también supiste ser el bálsamo que calmaba mis penas y te hiciste refugio.
Fuiste amor, del más bello, del más puro, y lo seguirás siendo eternamente, lleves el nombre que lleves. Excusé mis miedos en ti, pero me viste aprender, sentir, reir, amar, disfrutar, llorar, crecer.
Hoy llévate contigo lo más triste, mis penas, mis desaciertos, mis renuncias, mis cobardías, mis vergüenzas, mis miedos, mis fantasmas, mis silencios mal callados, las palabras mal dichas, la vanagloria, pero dejame el aprendizaje, dejame la moraleja de cada historia, dejame la alegria, el amor, los sentimientos más hermosos que haya experimentado, dejame la compañía de los que me rodean, la familia, los amigos, aquellos no tan amigos que de una u otra forma me hacen crecer.
Dejame la vida, dejame mis experiencias, que de todo intentaré ser mejor cada día.
Hoy te digo adiós! Pero antes te doy de esos abrazos enormes que se dan en las despedidas y te acompaño a la estación, mientras saltamos sobre los charcos de agua y vamos bajo este paragüas multicolor con el que bailamos la danza de la lluvia, que consiste en mojarnos igual.
Porque fuiste testigo de cada sonrisa, de cada abrazo, de cada momento, y porque han nacido las más hermosas amistades que siempre recordarán tu nombre, porque fueron en tu tiempo, en mi tiempo, en nuestro tiempo.
Adiós! te irás como Cenicienta cuando se acaba el hechizo, pero renacerás y te espero, un nuevo tiempo, nuevas promesas, nuevos proyectos, nuevas metas, incluso seguirán estando las que aún no alcancé y que aún lucho por llegar.
Llegas con un cambio, llegas con una sonrisa, llegas con caricias en el alma. Llegas con cada brindis que entonarán la más bella melodía que no será de bemoles y séptimas, será una melodía cargada de sueños, de anhelos, de deseos de estar mejor, de ser mejores, de ser felices.

Adiós 2008

Bienvenido 2009


Felicidades!


«Mëgg¥»