«Nubëz RØsäs»

Llovizna en esta ciudad de cemento
después de una precipitada mañana
la tarde ya tomó su lugar en este día
se posiciona en su mejor momento
sin prisas, sólo reposando y acompañando
en un día especial para la siesta.

Pero no es sólo una tarde....
es una tarde de lluvia, una tarde lenta
una tarde con vestigios de melancolía
sí, así es, por más que digan que
la lluvia limpia las heridas del alma....
hoy no sé si se están lavando o no.

Hoy ya no se escuchan discusiones
hoy sólo hay silencio
hay peleas, pero por parte de quienes
se sienten dejados de lado,
por quienes sienten culpa
por algo de todo lo que pasó.

Y acá no estamos para echarnos la culpa
estamos para seguir avanzando....
debemos subir escalones
por más que cada uno de ellos
produzca un dolor desgarrador
sólo hay que subir.

Hoy no creo que se sienta el dolor
creo que éste ya menguó
hoy predomina la incertidumbre
el qué hacemos, el cómo seguimos
y todos se miran sin mirar
esperando que el primer paso lo dé otro.

Y acá es cuando aparece la presión
el dolor no se siente, o se camufla
pero la presión es tanta, que vuelvo a encerrarme
vuelvo a buscar refugiarme en mi planeta
sólo siento la necesidad de ocultarme
de desaparecer y evitarme el esfuerzo.

Y el encerrarme sé que no me permite crecer
y no me permite valorar, valorar lo que me rodea,
lo que realmente vale, valorar personas,
personas que son pilares, personas que buscan mi bien
y que amo demasiado, personas que son tanto
y sólo les puedo decir: perdón y gracias.

«Mëgg¥»