«Nubëz RØsäs»

Hay momentos en la vida en que necesitamos desconectarnos del mundo, en sus amplios sentidos.
Aquello que nos hace mal lo tenemos a la vuelta de la esquina, en lo cotidiano del siglo XXI, en las redes sociales, en tu correo, en tus mensajes de texto.  Vivís rodeado de mensajes entrelineas que sólo buscan sacar lo peor de vos para seguir destruyéndote.
Ya dejó de ser un juego, ya dejó de ser entretenido, ya dejó de ser sano, es sentir ese cuchillo una y otra vez sobre la misma herida.

Sensible, susceptible, cansada, harta, ponele el adjetivo que más felíz te haga, no sé que es, si es algo de eso o todo junto con muchas otras miles de cosas, pero hasta acá llegué, basta para mí basta para todos!! fin del juego! ya me aburrió, no entendés?

Sean felices, adueñencé de las cosas, sigan pisándole la cabeza a los que realmente valen más que el oro como personas, sigan alardeando de su "servicio". Algo solo me queda claro, el Señor así como te levanta, te puede exiliar de un soplido cuando no le agrada tu corazón. Llamale prueba, llamale como quieras, sé que tengo un Dios justo. Creo que si hice las cosas tan mal el Señor no me hubiese permitido llegar hasta donde llegué, pero no importa, con que El sepa lo que me pasa, entienda lo que pienso, con eso me alcanza, porque sé que no es en vano.

Pero sí, hoy puedo decir que soy un ser humano, y como tal puedo y tengo derecho a flaquear, a parar, a decir basta. A mirar a otro lado, a mirarme a mí, a elegirme a mi misma y regalarme un poco más de tiempo, tiempo que no desperdicié del todo, sólo con algunos, con los que peleé con la verdad, con mi enseñanza, con mi experiencia, y si lo tuviese que volver a hacer, mil veces más lo haría, porque estoy orgullosa y estoy por demás tranquila de las razones por las cuales lucho, porque son mis ideales, son lo que creo, lo que amo y lo que jamás negociaré.

Basta de tantas palabras, es un tiempo de hechos, un final a todo aquello negativo, y un "bienvenido" a lo que necesito. Mis fuerzas hasta acá me acompañaron, ahora estaré a la deriva, desconectándome de la vorágine del mundo y su teléfono descompuesto.
Si me buscan, no estoy, creanme que estoy de paseo, y permitanmelo, así que no insistan. Asi como desaparezco, reapareceré en algún momento.
Regalenmé un 2011 en paz, sin gente molesta que se alimenta de pisar cabezas...
Creo que me lo gané.



«Mëgg¥»




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